La Virreina

Una Virgen del Carmen nacida del ‘cobre’

Hace diez años, el grupo parroquial de la Iglesia de San Pío X procesionó por vez primera la imagen de Nuestra Señora del Carmen realizada por Juan Vega. Este domingo volverá a salir a las calles

Miembros del grupo parroquial Nuestra Señora del Carmen de la Iglesia de San Pío X, con el párroco Andrés González, segundo por la derecha, en el banco y Pedro y Carlos Torres de pie.

Miembros del grupo parroquial Nuestra Señora del Carmen de la Iglesia de San Pío X, con el párroco Andrés González, segundo por la derecha, en el banco y Pedro y Carlos Torres de pie. / Alex Zea

Alfonso Vázquez

Alfonso Vázquez

«Todo lo que nace del pueblo es bueno por lo general. Jesús iba con el pueblo, María era del pueblo», recuerda el padre trinitario Andrés González, párroco de San Pío X. 

Detrás tiene el altar con la imagen de Nuestra Señora del Carmen, realizada por el imaginero Juan Vega, que hizo la Primera Comunión en esta parroquia de La Virreina. Este domingo 16, el Carmen de la Virreina procesionará por La Palma-Palmilla con medio centenar de portadores -hombres y mujeres- vestidos de marengo y cumplirá su primera década en la calle. Para la ocasión, estrenará una preciosa saya bordada y como ya es tradición, le acompañará la Banda de Música del Rocío.

Procesión del Carmen de la Virreina.

Procesión del Carmen de la Virreina. / La Opinión

«Todo lo que tiene la Virgen, desde último hilo al último alfiler es de la gente del barrio», subraya Carlos Torres, que además de antiguo profesor de Catequesis de Juan Vega, es el responsable del grupo parroquial Nuestra Señora del Carmen, el germen del que surgió todo.

Como explica, hace unos 15 años, por problemas con el techo de la parroquia, se trasladaron a la iglesia de Santo Tomás de Aquino las tallas del Cristo de Medinaceli y una Virgen de la Candelaria que se sacaban en procesión. 

«Como la mayoría de los primeros pobladores de La Palma-Palmilla vienen del Perchel, El Bulto, la playas de San Andrés... un grupo de vecinas del barrio pidió una Virgen del Carmen y se dio el visto bueno en un consejo parroquial; fue lo que la gente del barrio quería», señala.  

La Virgen del ‘cobre’

La talla, resalta Carlos Torres, se sufragó durante unos dos años «céntimo a céntimo porque somos una parroquia humilde, por eso la llamamos la Virgen del cobre: por el colorcito de las monedas». 

Mientras se concluía, la Archicofradía de la Virgen del Carmen del Perchel les cedió un cuadro de la Virgen.

La imagen arribó a la parroquia hace 13 años y tras tres recibiendo culto, en 2013 pudo salir en procesión, «al principio con andas muy chiquititas», recuerda. Hoy, cuentan con el que fuera el trono de traslado del Cautivo.

«La verdad es que no soy muy de imágenes ni cofradías pero a mí lo que más me ha demostrado la Virgen es la devoción que le tiene la gente», confiesa Carlos, que explica que el Niño Jesús que la acompaña lleva una medalla donada por una vecina de la barriada 26 de febrero. «Era de su hijo que murió y cada 16 de julio viene a ver si el Niño tiene la medalla».  

Pero hay muchos más detalles que resaltan esa devoción, como ese primer año que salió y otra madre entregó al grupo parroquial una pulsera de plata para la Virgen. «Era moderna pero había que ponérsela porque era de una niña con cáncer y ahora mismo, por ejemplo, la Virgen tiene un pañuelo en la mano, un lazo rosa bordado de una mujer que ha pasado por un cáncer de mama y que además este año va a llevar el trono»

La imagen estrenará saya en su décimo aniversario.

La imagen estrenará saya en su décimo aniversario. / La Opinión

Porque la procesión también es muy especial. Pedro Torres, hermano de Carlos, es el mayordomo de trono y cuenta que, aparte de que las personas que lo piden durante la procesión pueden llevar el trono unos minutos, los niños que participan en ella sostienen una gran red, realizada por familias de antiguos pescadores en la que los vecinos van prendiendo con imperdibles las peticiones para la Virgen. 

«Cuando termina la procesión todas esas peticiones las recogemos y como no son para nosotros, las tiene la Virgen en el interior de la imagen», cuenta Carlos Torres.

La medalla del Carmen de la Virreina ha sido diseñada por Carlos Torres.

La medalla del Carmen de la Virreina ha sido diseñada por Carlos Torres. / Alex Zea

Pedro, por su parte, también destaca un momento muy emocionante de la procesión, cuando llega al puente de La Palmilla. «Ahí está la gente esperándonos, se reza, se llora... puede ser como la Tribuna de los Pobres», explica. 

Además, en el trono, «cada arbotante, cada tulipa tiene grabada un nombre del barrio porque el dinero que se consigue cuesta mucho trabajo y lo pone la gente del barrio», remarca el coordinador del grupo parroquial. 

Puerta de entrada a Cáritas

Carlos Torres también subraya que la Virgen del Carmen de la Virreina «es una puerta» porque a través de ella, «conseguimos que la gente colabore con Cáritas». De esta manera, gracias a esta devoción han aumentado las ayudas: «No es posible que nos dediquemos sólo a conseguir dinero para comprar a la Virgen una corona si no tenemos la otra parte: la caridad», argumenta. 

El Carmen de la Virreina procesionará el día del Carmen de 8 de la tarde a 11 de la noche por las calles del barrio, con salida desde la parroquia. 

¿Será algún día hermandad o cofradía de Gloria? En el grupo parroquial prefieren ir paso a paso, sin ninguna prisa y disfrutar de una devoción que une a La Palma-Palmilla.