Premios Málaga

Premio Turismo 2023 para siete chefs con estrellas Michelin

La gastronomía que se hace en Málaga y provincia es uno de los grandes alicientes que atraen a los que nos visitan

Foto de seis de los siete chefs que recogieron el Premio Turismo 23 de La Opinión de Málaga (solo faltó Marcos Granda).

Foto de seis de los siete chefs que recogieron el Premio Turismo 23 de La Opinión de Málaga (solo faltó Marcos Granda). / JULIÁN NIETO

Benito Gómez (Bardal), Fernando Villasclaras (El Lago), José Carlos García (José Carlos García Restaurante), Dani Carnero (Kaleja), Mauricio Giovanini (Messina), Diego Gallegos (Sollo) y Marcos Granda (Skina y Nintai), representan la nueva gastronomía que se cocina en Málaga. Sus restaurantes ya son referencia, santo y seña de los nuevos aires gastronómicos que se respiran y se degustan en los cuatro puntos cardinales de la provincia malagueña. Su buen hacer en los fogones fomenta lo que se llama el turismo gastronómico, cada vez más en auge y que llena de magníficas experiencias gastro las agendas de visitantes, no importa la nacionalidad, que se dan cita a lo largo de la Costa del Sol.

Recoger el Premio Turismo 2023 de los Premios Málaga de La Opinión supone un espaldarazo al trabajo que realizan día a día en sus establecimientos, verdaderos templos ya de la restauración de Málaga, y una confirmación de que la comida y la buena cocina creativa está en pleno momento álgido de popularidad y de consumo por parte de los foodlovers.

«Que La Opinión nos conceda este premio es un orgullo no solo para mí, sino que lo es para todo el equipo, todos trabajamos con una gran ilusión cada día, y el agradecimiento del cliente, o terminar la jornada sabiendo que lo hemos hecho bien es la compensación de cada día, pero cuando recibes un reconocimiento de esta envergadura sientes una energía extra que te llena de satisfacción», señala Mauricio Giovanini.

Mauricio Giovanini.

Mauricio Giovanini. / .

Para Dani Carnero, que recientemente obtuvo su estrella Michelin en Kaleja, el premio de nuestro periódico es «al esfuerzo por hacer de Málaga un lugar con un turismo de calidad, y un referente nacional».

Dani Carnero.

Dani Carnero. / .

Para Fernando Villasclaras, el premio obtenido les ayuda «a seguir defendiendo nuestro territorio y a poner en valor nuestra gastronomía», un trabajo que, para Diego Gallegos , «es muy importante que se valore para conseguir trasladar la sostenibilidad a todos nuestros clientes».

Fernando Villasclaras.

Fernando Villasclaras. / .

Benito Gómez apela al alejamiento que Ronda tiene de los centros más importantes de la provincia de Málaga y valora el premio de forma más que positiva: «A todos nos gustan los reconocimientos, y si es de un medio tan potente como La Opinión, pues más. Desde fuera del circuito, en Ronda, todo reconocimiento se disfruta el doble», comenta

Benito Gómez.

Benito Gómez. / .

Para José Carlos García, el Premio Turismo 2023 de nuestro periódico significa un impulso para todo el equipo que trabaja día a día en José Carlos García Restaurante. «Estamos muy agradecidos a La Opinión de Málaga por habernos reconocido con este galardón», señala.

José Carlos García.

José Carlos García. / .

Los platos, los chefs, las creaciones culinarias, la alta comida en general, se han revelado como un potente aliciente que atrae a turistas y visitantes a los denominados templos de la gastronomía malagueña. «Disfrutar un buen momento de ocio sentado alrededor de una mesa es fundamental para unas buenas vacaciones, esto es algo que siempre se ha dado pero de una manera más equitativa con el resto de posibilidades que cada punto turístico ofrece. Actualmente la gastronomía ha ganado muchísimo terreno como consecuencia del esfuerzo de toda la comunidad gastronómica y no sólo de los chefs, me refiero a productores, empresarios, trabajadores etc. Todos han sido cada vez más profesionales y el resultado ha sido la conquista del mercado», relata Mauricio Giovanini, cocinero argentino autodidacta, que desde 2003 desarrolla toda su trayectoria profesional en Messina, su restaurante de Marbella con el que obtuvo su estrella Michelin en 2016 y que ha renovado en todos estos años.

Marcos Granda.

Marcos Granda. / .

Para Fernando Villasclaras, que está al frente de los fogones del Restaurante El Lago, en Marbella, con la estrella Michelin más antigua de la provincia de Málaga (2005), «la gastronomía es cultura y en pocos sitios del mundo se come tan bien como aquí en España. Los que nos dedicamos a la restauración tenemos que exigirnos conservar nuestra cocina en todo tipo de establecimientos. Para ello debemos potenciar la economía circular, que es la que nos da acceso al mejor producto de cercanía. En el caso de Málaga, los restaurantes como los nuestros en muchos casos son la mejor manera de respetar nuestra tradición y conservarla, es la mejor forma de explicarle al resto del mundo que viene a visitarnos, lo que somos».

Diego Gallegos, ‘el chef del caviar’, el producto estrella en su cocina e ingrediente que le ha catapultado a la fama, cuenta con una estrella Michelin en Sollo, su restaurante ubicado en la Urbanización Reserva del Higuerón, en Fuengirola. Para Gallegos, cada vez más, la gastronomía se tiene en cuenta como destino turístico. «En nuestra provincia tenemos la suerte de combinar varios factores que intensifican este turismo más allá del sol y playa, la combinación perfecta si sumamos la gastronomía a la parte cultural que ha enriquecido Málaga estos últimos años. No se trata solo del trabajo de los chefs, sino de una acción que comprende todo el sector hostelero, que busca la excelencia haciendo así de nuestra provincia un gran destino turístico».

Benito Gómez regenta Bardal, espacio galardonado con su primera estrella Michelin en 2018 y la segunda en 2019. Bardal es un proyecto cultivado por la pasión de un equipo profesional que diariamente consigue ganar la satisfacción de sus comensales con cada olor y sabor del mejor producto fresco. Su cocina, muy enraizada a la comarca, defiende el entorno y la memoria de una forma sencilla y cercana, sin modas ni artificios. Una filosofía libre de imposiciones que refleja el sello propio de Benito Gómez, que piensa que todo el trabajo llevado a cabo en Málaga y provincia en los últimos años «nos lo hemos ganado. No nos hemos puesto la chaquetilla para subirnos al carro, sino que hemos sido parte responsable de que todo esto que le está pasando a la gastronomía malagueña ocurra, y para que Málaga sea un destino gastronómico, no solo de sol y playa», subraya.

Si hablamos de situar la gastronomía malagueña en un hipotético ranking del que dicen es el país con los mejores cocineros y restaurantes del mundo, nuestros chefs apuntan alto en su puntuación aunque Diego Gallegos piensa que lo más importante es que «seamos un destino donde se disfrute de la gastronomía junto al resto de aspectos maravillosos que ofrece nuestra provincia». Aunque todos coinciden en señalar y hacen suyas las palabras de Fernando Villasclaras: «Lo bueno de la cocina española, es que cada territorio tiene su idiosincrasia y eso es lo que nos hace más ricos como país».

Diego Gallegos.

Diego Gallegos. / .

En otro orden de cosas, los establecimientos de hostelería entre los que se encuadran los restaurantes de nuestros siete premiados se convierten en los mejores representantes y embajadores de los alimentos malagueños para hacer de la provincia costasoleña una referencia gastronómica internacional, uno de los aspectos más valorados de la provincia de Málaga.

A los pescados y mariscos de la bahía conocidos mundialmente en forma de pescaíto frito, las pasas, el mango y aguacate, algunos quesos de cabra, el vino dulce, el aceite de oliva virgen extra, la aceituna aloreña, el chivo, o el tomate Huevo de Toro han dado paso a otros productos, menos conocidos, pero que son reivindicados por nuestros premiados por sus múltiples posibilidades en los fogones malagueños. Para Dani Carnero, la almendra tiene «posibilidades infinitas». Fernando Villasclaras apuesta decididamente por el sector hortofrutícola y la huerta malagueña: «Es increíble la riqueza que tenemos en verduras y en frutas de temporada en general. Hay que apoyar más a los agricultores para proteger esa riqueza», indica. En esa misma línea se pronuncian Benito Gómez y José Carlos García, quienes señalan al higo chumbo y a su hoja como un producto «con muchas posibilidades» . Mauricio Giovanini redobla su apuesta por los quesos y el tomate, y Diego Gallegos cree que «limitar nuestra despensa a un solo producto es muy complicado y tenemos que aprovechar todo lo que nos ofrece nuestra tierra. Y se acuerda de la labor que hace Sabor a Málaga, el organismo dependiente de la Diputación «que hace posible dar a conocer todas nuestras virtudes más allá de nuestro territorio».

Hay una nueva generación de chefs y restauradores formados por las escuelas que ya están tomando el relevo y ofrecen proyectos increíbles que empiezan a ser visibilizados por el gran público. La cocina malagueña ya es un referente fundamental de la cocina española donde ciudades como Málaga capital y Marbella son un punto de interés para cualquier turista del mundo. «El pulso de la cocina malagueña está mejor que nunca a nivel de sensibilidad, -subraya Fernando Villasclaras- se come muy bien por toda la provincia. Yo creo que estamos en un momento de vuelta hacia atrás en nuestras raíces y cada vez miramos menos fuera y más a nuestra memoria cultural».

El futuro «está asegurado y es muy brillante», señalan. Para los premiados, la cocina malagueña está demostrando que tiene calidad, con grandes profesionales en el sector que caminan «hacia un punto muy bonito, donde cada vez somos más los que defendemos las cosas bien hechas», reivindica Carnero, «hasta el punto de ser referentes en España, que no es moco de pavo», sentencia orgulloso Benito Gómez.

Para finalizar, y como el movimiento se demuestra andando, preguntamos a los chefs premiados que nos dijeran qué restaurante (que no fuera el suyo, obviamente) es en el que más han disfrutado últimamente y que recomendarían encarecidamente por la alta calidad de sus platos y servicio. Apunten estos nombres. Diego Gallegos se decantó por Mi niña Lola, «del gran chef Pablo Rutillant». Por su parte, José Carlos García encaminó sus pasos al interior de la provincia y cita la venta La Era (Puente de Don Manuel), en Alcaucín, «me encanta ir a comer allí en familia», destaca. Benito Gómez lo tuvo claro: Palodú, el local de Cristina Cánovas y Diego Aguilar que ha dejado Teatinos para instalarse en el centro de Málaga. Dani Carnero rindió homenaje a Benito Gomez y se decantó por Bardal. Mauricio Giovanini no pudo elegir uno solo y se refirió a Arte de Cozina y Takumi. Por último, Fernando Villasclaras citó El Saladero y el Chinchín Puerto, ambos en Caleta de Vélez.