¿Buscando vivienda en Málaga? Así está el metro cuadrado por distritos

Málaga, ajena a la tendencia a la estabilización de los precios que experimenta el país por la subida de los tipos de interés, cerrará este 2023 con la misma predisposición alcista que el mercado de la vivienda ha vivido en la capital a lo largo de todo el año.

Da buena cuenta de ello el último informe de la consultora Tinsa sobre el precio de la vivienda para el último trimestre de este ejercicio, que Málaga clausura con una subida interanual del 9%, de las más altas en el contexto nacional, en la tónica de las ciudades costeras de Valencia, Almería y Santa Cruz de Tenerife, y por encima de las subidas de Madrid o Barcelona, donde el precio ha crecido un 6,1 y un 3,5% respectivamente.

El precio medio del metro cuadrado en la capital se sitúa en 2.252 euros -por encima de la media provincial, situada en los 2.097 euros por metro cuadrado- y, de hecho, sigue acortando distancia, en concreto, un 7,1%, con respecto a su valor máximo de la serie histórica.

Si se compara con la situación en las grandes capitales españolas, Málaga se sitúa en el tercer puesto a nivel nacional en cuanto al precio del metro cuadrado, solo por detrás de Madrid y Barcelona, donde la media se sitúa en 3.780 euros y 3.714 euros respectivamente. Por detrás de Málaga están Sevilla, con una media de 2.112 euros el metro cuadrado; Valencia, con 2.019 euros y Zaragoza, con 1.715.

A nivel nacional,el valor medio de la vivienda terminada (nueva y usada) ha aumentado 4,1% interanual. «La desaceleración general y pausada de los precios es consistente con el descenso gradual de la demanda residencial que se observa desde finales de 2022, a medida que se comenzó a trasladar a la economía el impacto de la subida de los tipos de interés por parte del BCE. Aun así, el número de transacciones de compraventa se ha mantenido en niveles saludables durante 2023», señala Tinsa. «Los precios residenciales en las zonas de costa continúan reflejando en este trimestre una desaceleración más lenta que la media nacional, lo que resulta coherente con la existencia de una mayor demanda de segundas residencias para uso vacacional propio, que se corresponden con un perfil de comprador con alto poder adquisitivo y menos sensible al impacto de la inflación y los tipos de interés a la hora de tomar su decisión de compra».

Distritos

Por distritos, el más caro es el distrito Este, con un precio medio de 3.062 euros el metro cuadrado. Además es la zona de la ciudad en la que más ha subido el precio de la vivienda en el último año, un 13,3% así como el mayor rendimiento generado por una inversión en una vivienda adquirida hace cinco años, que se sitúa en el 8,3%.

Le sigue el distrito Centro, con 2.639 euros el metro cuadrado y una subida interanual del 9,4%; en Teatinos-Universidad alcanza los 2.519 euros el metro cuadrado, con una subida del 8,4%; en Carretera de Cádiz son 2.224 euros el metro cuadrado, con una subida del 8,7%; en el Puerto de la Torre, el precio medio está en 2.060 euros y la subida es del 9,3%; sigue Churriana, con un promedio de 1.916 euros y una subida del 7,8%; en Cruz de Humilladero son 1.907 euros, con una subida del 6,9%; Bailén-Miraflores llega a los 1.808 euros y experimenta una de las subidas más altas, del 11% interanual; en Palma-Palmilla son 1.585 euros y una subida del 6,6%; en Campanillas el precio es de 1.584 euros el metro cuadrado y una subida del 7,2% y, por último, Ciudad Jardín, el distrito más económico con 1.507 euros de media y una subida del 7,4%.

Esfuerzo en el pago

El informe incluye también el esfuerzo teórico anual, esto es, el porcentaje de renta disponible que un hogar medio tendría que destinar al pago de la primera cuota de una hipoteca que cubre el 80% del valor de una vivienda media a los precios actuales.

El objetivo es, según Tinsa, medir cómo de accesible es para un hogar medio el adquirir una primera vivienda en las distintas zonas del territorio nacional.

A nivel nacional, la consultora sitúa este esfuerzo en el 34,2 % de su renta disponible. En el caso de Málaga capital, ese esfuerzo se eleva hasta el 48,2%, solo superado por el 52,3 % en la ciudad de Barcelona y el 48,8 % en Madrid.