Las empresas de patinetes advierten contra el impacto de la obligatoriedad del casco en Málaga

La nueva Ordenanza de Movilidad Sostenible endurecerá así el uso del casco en los patinetes, que actualmente es «muy recomendable» en la norma vigente. Los usuarios de patinetes, según la ordenanza vigente, solo deben usar el casco de forma obligatoria en el supuesto de que circulen por la calzada porque no exista una vía ciclista alternativa, tramos en los que estos vehículos pueden alcanzar un máximo de 25 kilómetros por hora.

La nueva Ordenanza de Movilidad Sostenible, que está tramitado el Ayuntamiento de Málaga, establecerá la obligatoriedad del uso del casco para los Vehículos de Movilidad Personal, es decir en los patinetes eléctricos que circulen por la capital. Una medida novedosa, ya que pasará de ser «muy recomendable» a obligatoria en todos los casos.

La nueva norma especifica que «el conductor deberá utilizar casco de protección homologado o certificado». Asimismo, deberán llevar encima el certificado de circulación, tanto los vehículos propios como alquilados. En caso de no cumplirlo, se establece una multa de 100 euros.

Las empresas de alquiler opinan

La nueva regulación ha suscitado dudas y opiniones entre las compañías de patinetes que operan en la ciudad. En Málaga existe un amplio abanico de empresas de alquiler de patinetes, entre las que están Dott, Bolt, Tier; y que han reaccionado a la nueva ordenanza.

De las más de 260 ciudades en la que está presente Bolt, una de ellas es Málaga. La compañía indica que «hay que huir de la regulación en caliente», tal y como afirma Juan Luis Fernández, responsable de políticas públicas de Bolt en España.

Desde esta empresa de patinetes confiesan que «a través de nuestras comunicaciones recomendamos el uso del casco», aunque matizan «que por sí mismo, no asegura una protección efectiva».

Bolt propone al Ayuntamiento de Málaga customizar la velocidad de los patinetes o limitar su paso en caso de un acontecimiento: «Entendemos las preocupaciones del Ayuntamiento, pero existen más accidentes con las bicicletas, antes que con los patinetes. Lo que proponemos es abrir el abanico a otras medidas de seguridad», explican.

Para Fernández, «una segura planificación del tráfico, la segregación de carriles y no trucar los límites de velocidad de los patinetes», son aspectos clave para garantizar la seguridad de los usuarios.

Manuel Arauco, director general en España de Tier, asegura que «en Málaga ofrecemos la posibilidad a nuestros usuarios de utilizar un casco gratuitamente».

Sin embargo, aunque Tier «es un firme defensor del uso del casco, advertimos contra la obligatoriedad de su uso; ya que produce un impacto negativo en la adopción de la micromovilidad verde».

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Tal y como explica Tier, y según las encuestas elaboradas por la compañía, «se muestra que la obligatoriedad del casco disuade a muchos usuarios de utilizar vehículos privados y soluciones de micromovilidad compartida, igual que pasaría con la obligatoriedad del casco para las bicicletas. Por lo tanto, un requisito obligatorio puede conducir a una reducción masiva de la popularidad de la micromovilidad verde e impulsar indirectamente el uso de las modalidades convencionales, especialmente el coche privado.

Juan Luis Fernández coincide con Manuel Arauco y es que a ambas empresas les preocupa que esta medida pueda provocar una disminución del uso de este medio de transporte. A lo que añade: «En las ciudades donde ofrecemos casco gratuito a los usuarios, el porcentaje de uso del casco es extremadamente bajo, demostrando la ineficacia de la regulación», recalcan en Bolt.

Por otro lado, Dott, la empresa franco-holandesa, apunta a un desequilibro entre bicis, patinetes y bicicletas eléctricas. «Siempre fomentamos el uso de cascos, pero creemos que la regulación debería ser igual para ambas».