Rescate

Una búsqueda a contrarreloj en alta mar más allá de la provincia

Salvamento Marítimo ha rastreado una superficie equivalente a una vez y media la provincia de Málaga

Salvamento Marítimo suspende, por ahora, la búsqueda de los desaparecidos en Marbella con medios propios

Un helicóptero y una embarcación, en una operación en alta mar en la provincia.

Un helicóptero y una embarcación, en una operación en alta mar en la provincia. / marcel vidal. marbella

Un vecino avistó hace una semana, mar adentro frente a la costa de Cabopino, en Marbella, a dos jóvenes que, desde una embarcación a la deriva tras una avería en el motor, pedían auxilio.

El alertante trasladó el aviso a las fuerzas de seguridad poco antes de las 20.30 horas. Minutos después, Salvamento Marítimo trató de restablecer el contacto con los dos tripulantes, pero sin éxito.

A partir de ese momento, comenzó un dispositivo de búsqueda que se ha extendido entre Cádiz y Motril, en la costa granadina; y al norte de África para tratar de localizar a la embarcación Budión, construida en fibra y de 6,5 metros de eslora en la que dos vecinos de Ceuta de 26 y 31 años salieron a pescar desde el litoral de Estepona.

«A medida que pasa el tiempo, las probabilidades se diluyen. Dar una respuesta eficaz en las primeras horas es vital para rescatar con vida a cualquier persona que se encuentre en peligro en el mar», señala Salvamento Marítimo, que coordina unas operaciones que comenzaron con actuaciones de búsqueda en los puertos de Marbella, que cuenta con cuatro en su término municipal, y de Estepona.

El dispositivo de rescate ha rastreado hasta el momento, tras una semana de actuaciones, alrededor de 4.500 millas náuticas cuadradas para tratar de dar con el Budión, una superficie equivalente a una vez y media la provincia de Málaga.

Cambio en el dispositivo

Tras una semana de infructuosa búsqueda, Salvamento Marítimo ha dejado de desplegar medios específicos para la búsqueda pero ha alertado a las autoridades marroquíes y argelinas por si tienen conocimiento del suceso en sus zonas de responsabilidad, y ha iniciado una serie de radioavisos para avisar a las embarcaciones que navegan por la zona por si avistan a los desaparecidos.

Las operaciones se enfrentan a diferentes dificultades, entre ellas, además de la vasta zona de búsqueda, las corrientes y los fuertes vientos, que desplazan de su posición original cualquier objeto flotante.

El miércoles, el primer día desde la desaparición de los jóvenes, el viento alcanzó rachas de hasta 37 nudos.

«El tener siempre la información de lo sucedido en el menor tiempo posible es crucial para el éxito de cualquier búsqueda de personas», señala Salvamento Marítimo.

También influyen las condiciones meteorológicas, la temperatura del mar y del aire o el tiempo de exposición de los tripulantes, el tipo de ropa que vistan en el momento de la desaparición si cuentan con algún elemento externo de flotación.

Imagen de archivo de una embarcación de Salvamento Marítimo.

Imagen de una embarcación de Salvamento Marítimo. / .

Medios movilizados

Salvamento Marítimo dirige desde su centro de operaciones en el municipio de Tarifa un dispositivo de rescate en el que ha participado un avión de Frontex, la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas fundada en 2004 para ayudar a los Estados miembros de la UE y a los países asociados al espacio Schengen a proteger las fronteras exteriores.

El dispositivo ha contado también con las salvamares Gadir, Alnitak y Hamal, y los helicópteros Helimer 223 y Helimer 207, de Salvamento Marítimo; agentes de la Guardia Civil; y la lancha Cronos, de Cruz Roja.

«La búsqueda activa se mantiene siempre y cuando existan probabilidades de encontrar a una persona con vida», agrega Salvamento Marítimo.