Málaga de un vistazo

Tractores

Cortes de carretera de los agricultores en la provincia de Málaga.

Cortes de carretera de los agricultores en la provincia de Málaga. / L. O.

Jordi Cánovas

Jordi Cánovas

Sin apenas agua, pero con gasolina de sobra, los tractores siembran las carreteras de atascos esperando cosechar en sus aparatosas protestas alguna mejora a una situación cada vez más catastrófica para una agricultura que depende demasiado de un agua que no hay y que no llega. En un país donde cada vez llueve menos y el 80% del agua que se consume se destina al cultivo la situación había de tornarse en algún punto insostenible. Las carreteras de disfrazan de campo en la cabalgata de vehículos agrícolas remolcando sus problemas buscando un lugar donde descargarlos y llevarse consigo en el viaje de vuelta alguna solución que merezca la pena. Es larga la lista de peticiones y no se sabe si porque lo quieren todo o porque quieren dar muchas opciones. A veces el que mejor conoce el problema por padecerlo en todas sus consecuencias es el que menos idea tiene de cuáles son las mejores formas de afrontarlo y sobre todo, de todas esas, las que se pueden aplicar. Aprovechando el carnaval todo el mundo se disfraza de aliado, siempre es fácil ponerse del lado del que pide si es otro el que lo tiene que dar y el que recibe por no darlo. Hay que ver la cantidad de adalides que se acerca a una multitud para liderarla, si no sabes movilizar a la gente lo mejor es ponerse delante y hacerles creer que te siguen.

Será febrero un mes corto que a muchos se les hará largo, un mes de tractores y detractores y fanáticos, de erre que erre, de tracciones y traicionados, de tratos sin contratos, de encuentros y encontronazos, de ataques, de contrarios de contrataques y contrariados. Un mes corto, pero con un día de más o dos, si contamos también el de los enamorados, pues quién necesita un día para celebrar que no sabe ni en qué día vive.