Cartas al director

DECEPCIONANTE ÁBALOS

En política, nadie está libre de tener corruptos; lo que importa es el modo de actuar cuando lo hay. Mientras el PP arenga «una trama contra nosotros», martillea discos duros y emplea recursos y funcionarios del Estado para destruir pruebas, la izquierda actúa con contundencia y tolerancia cero, indaga «caiga quien caiga», solicita la entrega del acta de diputado para depurar responsabilidades políticas y crea una comisión de investigación que escrute todo con transparencia.   En cuanto a Ábalos, esto no va de si es inocente o no, como se empeña en sostener –ya se verá–, sino de asumir responsabilidades políticas por nombrar y dar poder a un sinvergüenza. Fue Ábalos quien le reprochó a Rajoy «su obstinación de aferrarse al cargo hasta las últimas consecuencias, cueste lo que cueste, sufra quien sufra». Y, como no todos somos iguales, la izquierda sufre y se decepciona por el tiempo transcurrido y la decisión de aferrarse al cargo y pasarse al Grupo Mixto.   Desolador final elegido, Ábalos.

Miguel Fernández-Palacios Gordon. Málaga