Semana Santa 2024

Las Penas: identidad y elegancia

La cofradía de Pozos Dulces estrena un incienso exclusivo para distinguirse del resto

Isabel Cisneros

Isabel Cisneros

La elegancia es el adjetivo que mejor define la estación de penitencia de Las Penas el Martes Santo. Un equilibrio perfecto entre la lección aprendida del orden y de lo clásico convirtiéndolo en atemporal. 

A las 17.45 horas se abrían las puertas del Oratorio Santa María Reina y Pozos Dulces empezaba a disfrutar de la templanza que desprende el cortejo de esta Hermandad. El Santísimo Cristo de la Agonía sale de su templo a los sones de las Cornetas y Tambores del Paso y Esperanza, con paso firme, pero sin perder su seña de identidad. Dentro aguarda María Santísima de las Penas.

El trabajo de esta Hermandad se enmarca en mostrar quiénes son. Unida a su elegancia ya asumida se encuentra el olor que deja a su paso. Esto ya no depende únicamente del aroma de las flores del trono de la Virgen, que también, sino de la humareda de incienso que forman los turiferarios y monaguillos delante de cada trono.

Este año esto se eleva aún más, ya que se han encargado de crear un nuevo incienso exclusivo de la cofradía. Esa gran nube de incienso hace que por un momento dejes de ver a la imagen, pero cuando te introduces en ella se produce una conexión con el sufrimiento de Cristo y su Madre por su muerte en la Cruz.

La coordinación de los hombres de trono de ambas imágenes con la música que les marca el paso es impecable durante todo el recorrido; determinación es la actitud de los portadores de María Santísima de las Penas y el Santísimo Cristo de la Agonía.

Salida procesional de la Cofradía de Las Penas, el Martes Santo de 2024.

El nuevo manto de María Santísima de Las Penas. / Álex Zea

El manto de María Santísima de las Penas

Tres metros cúbicos de ciprés, 1.875 unidades de clavel blanco, 203 tallos de vendela ecuatoriana, 350 rosas blancas, 240 orquídeas y 525 paquetes de margarita Euryops holandesa de color crema; esa ha sido la elección de la diseñadora de la artista Charo Castillo Bellver, también hermana de la cofradía.

El resultado tiene como motivo principal la alegoría de la Virgen como Estrella de la Mañana, rodeada por un rosario que rememora la pasión de Jesús junto a María. La confección del manto de la Virgen por parte de un equipo de operarios del Servicio de Parques y Jardines del Ayuntamiento, se viene celebrando desde 1944, de forma que cada año la imagen mariana de la Hermandad de las Penas porta un manto realizado con flores naturales.