El ahorro de los malagueños en depósitos bancarios marca nuevo récord pese a la alta inflación

El sector privado malagueño continúa presentando cifras récord de ahorro en depósitos bancarios, a pesar de que factores como el impacto de la inflación en las economías domésticas o la subida de las cuotas hipotecarias hacen presagiar a los expertos que esos fondos, que crecieron ostensiblemente durante los años de pandemia, empezarán a reducirse próximamente de forma natural ante la necesidad de las familias de tirar de ellos. De momento, y aunque seguro que ocurrirá, eso aún no se percibe: el saldo total de dinero que las familias y empresas de la provincia tienen ingresados en depósitos bancarios, según las últimas cifras publicadas ayer por el Banco de España, presenta a junio de 2023 un nuevo techo histórico de 33.829 millones de euros. Las cifras superan en un 36% a las de marzo de 2020, cuando estalló la crisis sanitaria del Covid. El aumento, en números reales, ha sido de casi 9.000 millones desde entonces.

Y es que el estallido de la pandemia abrió hace ahora tres años y medio una época en la que, de inicio, la declaración del estado de alarma congeló buena parte del consumo (sobre todo el vinculado al ocio) y mantuvo en los meses siguiente al sector privado en posiciones de gasto muy prudentes. Todo eso motivó que el volumen de dinero que familias y pymes tenían ingresado aumentara de forma significativa.

El vicedecano del Colegio de Economistas de Málaga, Antonio Pedraza, señala que lo más probable es que el ahorro extra acumulado por el sector privado en estos tres últimos años comience a dar síntomas de bajada en este tramo final de año, cuando se haya computado el gasto en vacaciones del verano y se observen los efectos de la desaceleración económica provocada por la política de subida de tipos de interés que están aplicando los bancos centrales. Si ese descenso no se ha percibido en la primera mitad de este 2023, apunta Pedraza, es por la persistencia de lo que denomina «ahorro preventivo». Es decir, la apuesta de aquellos hogares con capacidad económica suficiente para aumentar sus fondos propios en vista de la incertidumbre que sigue dominando el panorama económico internacional. Eso puede llevar a muchos ahorradores a mantener «posiciones bajas» de consumo.

A todo eso, Pedraza añade una característica específica de Málaga en relación al volumen al alza de los depósitos bancarios. «A partir de primavera y de cara a todo el verano es cuando más gente se incorpora al mercado laboral. Son personas que, en muchos casos, trabajan varios meses de forma temporal y no realizan gastos de vacaciones. Y en muchos casos esos sueldos son un acopio de ingresos de cara al invierno», apunta.

Pedraza, que también es presidente de la Comisión Financiera del Consejo General de Economistas, afirma en todo caso que lo lógico es que ese ahorro empiece a dar próximamente signos de descenso. «Lo normal es que baje debido a la precariedad de esos empleos temporales del turismo. También porque el coste de la vida sigue subiendo más de lo que lo hacen los salarios», añade. El Colegio de Economistas de Málaga ya advertía hace unas semana de que la inflación subyacente y la escalada del Euríbor están perjudicando especialmente a los ciudadanos con menos recursos.

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Una economía «más saludable»

Por otro lado, Pedraza afirma que el aumento del ahorro habla de una economía «más saludable». Por ejemplo, la proporción entre créditos y depósitos ofrece ya en Málaga una relación mucho más equilibrada que en épocas anteriores. El sector privado adeuda ahora mismo a los bancos en préstamos 34.450 millones de euros o, lo que es lo mismo, un 1,8% más de lo que tiene ahorrado en depósitos. La ratio es muchísimo más baja que en 2008, año del estallido de la gran crisis económica, cuando se manejaban 47.500 millones en créditos, lo que suponía un 135% más de los apenas 20.000 millones que se tenían ahorrados por aquel entonces.

El cambio obedece a que, por un lado, el sector privado se ha «desapalancado» (ha reducido su deuda) y, por otro, el ahorro en depósitos ha crecido.

Ahorro pandémico

El Banco de España comentaba este verano en un informe que el ahorro extra acumulado por los hogares españoles desde el estallido de la pandemia asciende a unos 100.000 millones. Sobre el destino que se vaya a dar a esa cantidad, el regulador sugiere que no cabe esperar que «proporcione un impulso muy significativo al consumo agregado de los hogares en los próximos trimestres» sino que más bien podría incentivar a los hogares a destinar una mayor proporción a la amortización de préstamos hipotecarios, ahora que el Euríbor ha subido de manera significativa.

«Los hogares conservan el grueso del ahorro extraordinario acumulado durante la pandemia en activos financieros y, en particular, en activos líquidos», explicaba el documento.

La realidad, eso sí, es que sólo aquellas personas con posición económica holgada han tenido la posibilidad de ahorrar. El Banco de España estima que la mayor parte del exceso de ahorro acumulado en pandemia se concentra en familias de renta alta (casi el 70%, de hecho).

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