Ángeles Muñoz defiende la «honorabilidad y trayectoria profesional» de su marido

La alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz, defendió ayer la «honorabilidad y la trayectoria profesional» de su marido, el empresario sueco Lars Broberg, al que se investiga en una operación policial contra supuestos delitos de blanqueo de capitales y pertenencia a organización criminal vinculada al tráfico de drogas.

«Estoy convencida de que, una vez se levante el secreto de sumario sobre las actuaciones, quedará todo negro sobre blanco», señaló la alcaldesa y también senadora del PP.

Muñoz aseguró que no existe «ninguna vinculación» ni personal ni como alcaldesa ni de la gestión municipal con la actuación policial. «Eso tiene que quedar muy claro. En ese afán que muchas personas tienen de dañar, no sólo mi imagen ni lo que represento como alcaldesa sino, sobre todo, la imagen de Marbella, cualquier cosa les basta, aunque sea tangencial», apuntó.

Agentes de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional se desplazaron desde Madrid para realizar el martes un registro en las oficinas de una empresa propiedad de Broberg y ubicadas en el centro comercial y de negocios Plaza, en el distrito de Nueva Andalucía.

Durante la inspección, que los agentes realizaron vestidos de paisano, el marido de la regidora contó con un letrado de su confianza y fue detenido para garantizar las diligencias del registro, según diferentes fuentes. Posteriormente fue puesto en libertad y pasó en el domicilio familiar la noche del martes al miércoles.

Además de en las oficinas de Broberg, los agentes realizaron nueve registros en domicilios, locales comerciales y un bufete de abogados entre Marbella y Estepona.

La operación se ha saldado con nueve detenidos, que ayer pasaron a disposición judicial y entre los cuales figuran un agente de la Policía Local que desarrolló funciones de escolta para la alcaldesa en mandatos anteriores y varios ciudadanos suecos.

Además, entre los investigados en la operación se encuentra un hijastro de la regidora, Joakim Broberg, también de nacionalidad sueca, acusado de integrar una organización internacional de narcotráfico y blanqueo de capitales y al que aún no se ha detenido, según adelantó elDiario.es.

La operación se desarrolla en cumplimiento de una Orden de Justicia Internacional por parte de del Departamento Nacional de Operaciones de Suecia.

El caso, decretado secreto, lo instruye el Juzgado Central de Instrucción número seis de la Audiencia Nacional y, por parte sueca, el Ministerio Fiscal de Estocolmo.

El Gobierno local asegura que las actuaciones no guardan relación con la alcaldesa o la gestión municipal.