Especial 28F

Andalucía ante los retos del futuro

Hospital Materno Infantil de Málaga.

Hospital Materno Infantil de Málaga. / L. O.

Javier Salas

Javier Salas

Hoy celebramos la identidad andaluza, una singularidad que ha sido reconocida a base de mucho esfuerzo y de la lucha de mujeres y hombres que en su día estuvieron comprometidos y que se dejaron la piel, y algunos la vida, para un logro que hoy es indudable. Y que hoy es una realidad y un motivo de satisfacción a pesar de que en épocas no muy lejanas no fueron todos los que apostaron por nuestra identidad. Incluso quienes hoy la disfrutan y la enarbolan como un logro propio, y sus precursores políticos, no estuvieron del lado de la autonomía andaluza. Conviene recordar la historia y de dónde venimos cada uno de nosotros.

Andalucía es una tierra en la que sus gentes siguen luchando por una vida mejor. Hoy de otra manera, con otras inquietudes y con otras necesidades que hay que analizar y poner encima del tablero para que puedan ser satisfechas por quienes dirigen nuestra comunidad autónoma. En los gérmenes de la autonomía andaluza la ciudadanía afrontó los problemas de frente, sin eludirlos. Y hoy, esa ciudadanía necesita que quienes nos gobiernan hagan lo mismo.

Hoy en día los dos principales problemas de nuestra región son la Sanidad, que afronta sin lugar a dudas la peor de las situaciones después de que nuestro sistema sanitario público andaluz haya sido referente internacional en el pasado; y la sequía, que hace ya meses que azota la vida cotidiana de nuestros vecinos y vecinas y de todo nuestro tejido productivo. Una sequía que en el caso de la provincia de Málaga es una asignatura pendiente del Gobierno andaluz que tiene las competencias en exclusiva.

La Sanidad fue una de las banderas que el actual presidente de la comunidad, Juan Manuel Moreno Bonilla, enarboló para conseguir la alternancia política en Andalucía. Y lo consiguió. Por primera vez en la historia el Partido Popular gobernó nuestra región. Y tras cinco años de gobierno en Andalucía los andaluces ya van conociendo las intenciones del presidente andaluz. Sepultar la Sanidad Pública y a sus profesionales y dedicar todos los recursos económicos públicos, que costeamos todos los andaluces y andaluzas con esfuerzo, a la sanidad privada cuando podrían dedicarse a reforzar la maltrecha y degradada sanidad pública andaluza. Es un hecho evidente que cualquier andaluz puede comprobar en su centro de salud, y que cada día denuncian los profesionales y las organizaciones sindicales, pero que no tiene quizá tanto eco como los titulares vacíos de la maquinaria propagandística de Moreno Bonilla.

La otra gran cuestión es la sequía, especialmente acuciante en Málaga, donde la Cuenca Mediterránea Andaluza -competencia exclusiva de la Junta de Andalucía- agoniza ante la inacción del Gobierno andaluz. Cinco años de gobierno del PP y cuatro decretos de sequía después, la situación no deja de empeorar. El día que el Gobierno andaluz deje de dedicarse a fabricar titulares que luego no cumple y se dedique a gestionar sus competencias los malagueños y malagueñas podrán tener algo de tranquilidad y mirar al futuro con optimismo. El ejemplo más palmario de esta inacción es que la Junta de Andalucía ha tardado 8 meses en decidir la ubicación de la desaladora de la Axarquía que será financiada al 100% por el Gobierno de Pedro Sánchez ante la pasividad de Moreno Bonilla en tomar medidas.

Necesitamos un Gobierno andaluz que se comprometa con los andaluces y las andaluzas y con los problemas reales que tienen, como el Ejecutivo de Gobierno de Pedro Sánchez así lo ha hecho en los últimos cinco años. Necesitamos un Gobierno de Moreno Bonilla que pierda menos tiempo en confrontar con el Gobierno de España en sus aspiraciones de dar el salto a Madrid y se encargue de los andaluces. Debe recordar el presidente de la Junta que los andaluces le dieron la confianza para que se ocupara de ellos y no para preparar su ascenso personal a costa de quienes le votaron.

Y que lo haga en una época en la que Andalucía tiene las mayores transferencias de fondos económicos por parte del Gobierno de España. Nunca antes nuestra tierra había contado con más financiación y con el espaldarazo de unos fondos europeos que, tal y como refleja en cada informe que realiza la Cámara de Cuentas están siendo infrautilizados por el Gobierno de Moreno Bonilla, que muestra una vez más su incapacidad de gestión con una paupérrima ejecución de los mismos. En Andalucía necesitamos un Gobierno andaluz que gobierne y que se ocupe de los andaluces y andaluzas y de sus principales problemas