Supercopa Endesa

La Supercopa, único trofeo nacional ausente en la vitrina de Los Guindos

El Unicaja competirá este sábado ante el UCAM Murcia -21.30 horas- para llegar a la final de un título que los cajistas han disputado hasta en cinco ocasiones a lo largo de su historia y que siempre se ha escapado  

El Unicaja activa el chip Supercopa

El trofeo de la Supercopa Endesa espera en Murcia a los cuatro participantes, entre los que etsará el Unicaja.

El trofeo de la Supercopa Endesa espera en Murcia a los cuatro participantes, entre los que etsará el Unicaja. / Mariano Pozo

Beatriz Tocón

Beatriz Tocón

El Unicaja afronta este sábado uno de los primeros grandes retos de la temporada: la Supercopa Endesa. Una campaña muy especial en la que peleará por cuatro títulos -Liga Endesa, Copa del Rey y Basketball Champions League, además de la Supercopa-, y donde tendrá el objetivo de sumar ahora un trofeo hasta ahora ‘desconocido’ para la afición verde y morada, a pesar de haber competido por él hasta en cinco ocasiones.

No es, ni mucho menos, una obsesión, pero lo cierto es que pocas veces estará el equipo tan cerca de un título. Son 80 minutos -si ninguno de los partidos llega a la prórroga- los que tiene el Unicaja por delante para colocar en Los Guindos el único trofeo nacional ausente en las vitrinas. Hay dos Copas del Rey (2005 y 2023), una Liga Endesa (2005/06), una Copa Korac (2001) y una Eurocup (2017). Un palmarés más que envidiable al que le falta para coronar el baloncesto nacional la Supercopa.

Ahora bien, no será ni mucho menos fácil. Por delante tiene, en primer lugar, a un UCAM Murcia que se ha reforzado muy bien este verano y que jugará con el deseo de regalarle a su afición un título en el Palacio. Por el otro lado del cuadro se citan los dos grandes ‘cocos’ del baloncesto, Barça y Real Madrid, de donde saldría el hipotético rival cajista en caso de alcanzar la final del domingo. 

La última participación del Unicaja en la Supercopa fue en 2017, tras ganar la Eurocup

La última participación del Unicaja en la Supercopa fue en 2017, tras ganar la Eurocup / ACBPHOTO

Es cierto que aún es pretemporada. Ibon Navarro se ha encargado de repetirlo en varias ocasiones. Sin embargo, es un trofeo y uno al que especialmente cuesta llegar. De hecho, el Unicaja no competía en una Supercopa desde 2017. Tan difícil es llegar, si no se acoge la cita, que solo se clasifican el campeón de Liga Endesa -Barça-, el campeón de Copa del Rey -Unicaja-, el subcampeón de Liga -Real Madrid- y el anfitrión -UCAM Murcia-. En definitiva, una oportunidad única. 

Un torneo con muchas bajas

También se ha dado el discurso en los últimos días que la Supercopa contenta al campeón por ganarla y a los otros tres equipo por la preparación de la pretemporada. Sin embargo, el Unicaja llega a la cita con muchas incógnitas y, a la vez, una idea muy clara: lo que se vea este fin de semana en la Región poco o nada tendrá que ver con las primeras jornadas de ACB.

Alberto Díaz, en las semifinales de la Supercopa de 2017 ante el Valencia Basket.

Alberto Díaz, en las semifinales de la Supercopa de 2017 ante el Valencia Basket. / ACBPHOTO

David Kravish, Yankuba Sima y Augusto Lima van a ser baja este fin de semana. Es decir, ningún pívot natural luchará por la Supercopa. Lo tendrá que hacer Ilimane Diop, quien hará pareja en el ‘5’ junto a Dylan Osetkowski. Un movimiento que automáticamente deja ‘solo’ a Will Thomas, a la espera de que el cuerpo técnico y los servicios médicos tomen una decisión definitiva sobre Melvin Ejim tras aterrizar este mismo miércoles en Málaga. Tampoco hay excelsas noticias en el juego exterior. Llegarán Alberto Díaz y Kendrick Perry con el rodaje justo del Torneo Costa del Sol y algo más de una semana de entrenamientos. 

Sea como fuere, cualquier ocasión de alcanzar un título merece la pena y este fin de semana llega una nueva oportunidad de luchar por el sexto trofeo de la historia. Hubo cinco oportunidades anteriormente. Es muy posible que entonces se produjera con el equipo ya formado al completo y sin tantas lesiones. Sin embargo, si algo ha demostrado esta plantilla es la posibilidad de convertir en viable lo improbable, de luchar contra los ‘gigantes’ y la Supercopa no será una excepción.